La elaboración de material preexistente sustituye a la antigua producción origial de este. Los “escombros de la cultura” constituyen, por así decirlo, el futuro cercano de la producción. Continuar con las reglas hasta hoy vigentes significaría, en el futuro, plantearse las siguientes preguntas: ¿a quién le está permitido ser creativo?, ¿quién no se lo puede costear? ¿a quién excluye la economía por no poder pagar las licencias o declarar los derechos? Abordar seriamente esas preguntas no significa de ningún modo cuestionar el derecho de autor en sí. Pero significa que no se puede seguir utilizando ese derecho sin modificarlo.
+ + + + + + + + + + + +
Mercedes Bunz. “La utopía de la copia”
Interzona editora
+ + + + + + + + + + + +